Sigue tu corazón.
Sé sincero contigo mismo.
Haz lo que te haga feliz.
Pasa tiempo con quien te haga sonreír y sobre todo que haga sentir mejor persona.
Ríe tanto como puedas.
Ama mientras vivas.
Di lo que tengas que decir.
Encuentra el coraje para sentirte diferente, pero hermosa/o si tener que seguir o imitar a alguien, seas tu..
Encuentra en tu corazón lo que eres y siéntate bien contigo mismo para que los demás se sientan bien también.
Entiende que no necesitas muchas personas en tu vida, sólo a unas pocas geniales y especiales las necesarias para aportarte algo que sume a tu vida.
Las personas que realmente tienen que estar en tu vida van estar y las que no déjelas ir.
Deje que se vaya los no te aporten nada a su crecimiento como persona así que no te rebajes ni a ti ni a tus estándares ni a los demás por las razones equivocadas.
Permita que cada una de esas personas tenga la libertad de ir y venir cuando sea el momento.
Libérese del apego a personas, cosas, situaciones y acciones.
El apego hace daño a nuestros y a otros nos frena la caminada hacia nuestra crecimiento espiritual.
Se fuerte cuando las cosas se pongan difíciles.
Recuerda que el universo siempre está haciendo lo correcto en todas las circunstancias.
Reconoce cuando te equivoques y aprende de ello.
Siempre mira atrás y ve cuánto has crecido, y siéntete orgulloso de ti mismo.
Aprecia todas las cosas que tienes.
Celebra tus pequeñas victorias.
Perdona.
Y deja de lado las cosas que no puedes controlar.